Un autómata celular lineal consiste en un arreglo unidimensional de celdas o células, cada célula puede tomar como valor un elemento de un conjunto finito de estados, la cardinalidad de se define con . Una célula actualizará su valor dependiendo del estado en que se encuentre y el de vecinas a cada lado, donde a se le denomina como radio de vecindad; de esta forma células generan una nueva célula, dicho bloque de células se le conoce como vecindad. El mapeo que especifica que célula forma cada vecindad posible se le llama la regla de evolución.
Bajo la acción local de , una configuración o estado global del autómata evolucionará en otra nueva configuración al aplicar a cada una de las posibles vecindades contenidas en la anterior, es decir, cada célula actuali-za su estado. Para este proceso, en cada aplicación de , los elementos finales de cada vecindad se tomarán como los elementos iniciales de la siguiente vecindad, existiendo un traslape entre las vecindades.
Así, empezando desde el instante con una secuencia inicial de células o configuración inicial, se producirá una nueva configuración que define el estado global del autómata en el instante y este proceso se repite de manera indefinida, esta secuencia de estados globales o configuraciones es la que nos da la dinámica del sistema. Al conjunto de configuraciones de un autómata celular lineal lo denominaremos como .
Una característica de estos sistemas es que tanto el tiempo como el espacio son discretos, esto es ya que el paso de una configuración a otra se muestra en pasos discretos y la interacción local especificada por se da entre células que toman valores discretos de un conjunto finito de estados.